¿Cuántas veces habremos pasado por aquí? Es uno de los sitios que da igual el número de veces que lo hayamos visto, nunca te cansas de mirarla y contemplar toda la belleza que transmite. La Plaza de España guarda una historia que merece la pena conocer, ¡sigue leyendo y entérate de todo!
Los comienzos de la Plaza de España
La Plaza de España, llamada así desde 1940, fue el comienzo de la expansión urbana de la ciudad hacia el sur. Con el gobierno liberal de 1833, se cubrió la plaza con suelo urbano fomentando así el desarrollo de la ciudad, dejando atrás la urbe antigua y limpiando las ruinas que nos dejó Los Sitios de Zaragoza en 1808.
Tras la Desamortización de Mendizábal en 1835, el suelo del convento San Francisco quedó destruido. Por lo que en 1853, se construyó allí la sede de la Diputación Provincial. En 1952 su fachada se sustituyó por otra que realizó Teodoro Ríos.
La fuente tan característica de la Plaza de España
En 1845, colocaron en el centro de la plaza la Fuente de la Princesa. Fue entonces cuando hubo por primera vez agua corriente en el centro de la ciudad. Esta se reemplazó por el Monumento de los Mártires de la Religión de la Patria en 1904, fuente que podemos contemplar hoy en día. Hace memoria al templete Cruz del Coso, en el cual innumerables mártires cristianos fueron sacrificados por su fe. Sus cenizas se conservan en la iglesia de Santa Engracia.
Dicha fuente la creó Agustín Querol y representa a un aragonés moribundo sujetado por un ángel que está señalando al cielo. ¿Te habías fijado alguna vez?
Paseo de la Independencia
En 1860 nació el Paseo Imperial, actualmente llamado Paseo de la Independencia, un bulevar central delimitado por edificios y porches. En 1910 nace la fachada de La Joyita, en frente se encontraba el Coso y, en él, el Casino Mercantil, obra realizada por Francisco de Albiñana y que hoy en día es una sede bancaria.
Batallas, fiestas, torneos, han atravesado esta plaza a lo largo de los años. Después de todos los cambios que ha sufrido desde sus comienzos hasta ahora, en ningún momento ha dejado de ser uno de los puntos más simbólicos de Zaragoza, y es que esta ciudad esta llena de curiosidades, ¿no te parece? Cuéntanos qué te ha parecido.